Droide sonda

Droide sonda «Víbora», de Arakyd
Droide grande (cuarto grado) explorador 1 (CL 1)

Iniciativa +6
Sentidos Visión en la oscuridad, visión en la penumbra; percepción +9
Lenguajes Básico, binario
Defensa Reflejos 16 (desprevenido 15), Fortaleza 16; Voluntad 13
Pg 34
Umbral de daño 21
Inmune Rasgos droide
Velocidad 6 casillas (flotante)
Cuerpo a cuerpo Sin armas +4 (1d6+4)
A distancia Blaster +1 (3d6)
Espacio de lucha 2x2 casillas; Alcance 1 casilla
Ataque base +0; Presa -1
Acciones especiales Autodestrucción (ataque de área +5, 4d6, 2 casillas de radio de acción)

Características Vigor 18 (+4) destreza 12 (+1) constitución -- inteligencia 12 (+1) sabiduría 15 (+2) carisma 11 (+0)

Talentos Sentidos agudos

Dotes Competencia con armadura (ligera), competencia con armas (pistolas, armas sencillas, lanzaproyectiles)

Habilidades Aguante +5, conocimiento (saber galáctico) +6, iniciativa +6, percepción +9, sigilo +1, supervivencia +7

Sistemas Locomoción flotante, procesador básico, 2 apéndices manos, 2 apéndices garras, 2 apéndices herramientas, paquete de sensores mejorados, visión en la oscuridad, sistema de autodestrucción (4d6), cerradura de acceso, comunicador interno, armazón de duracero (+4 armadura)

Posesiones Unidad sensora, unidad de grabación de video, bláster (tratar como una pistola bláster)

Disponibilidad Restringido
Coste 18500 créditos

La Estrella Remota tiene seis droides sonda (probots) para cartografiar estrellas y explorar mundos. Estas unidades pertenecieron originalmente al moff Sarne, y fueron capturadas durante la Batalla de Kal'Shebbol.

Los técnicos de la Estrella Remota están reprogramando las unidades para que sean leales a la Nueva República. Hasta el momento han acabado la reprogramación de dos de las unidades, demostrando que si bien la lealtad se puede programar, ello no tiene por qué afectar al carácter: las unidades siguen siendo bastante hoscas, incluso cuando se comunican en lenguas droides.

La Estrella Remota ha montado un laboratorio de operaciones de droides sonda (en la cubierta dos), donde se almacenan y mantienen las cápsulas mensajeras y los probots.

A los probots se los conecta como servidores a sus cápsulas hiperespaciales y se los envía a sistemas inexplorados. Examinan cualquier mundo potencialmente habitable desde su órbita, buscando signos de civilización o de bases militares imperiales. Utilizan sus transceptores subespaciales (limitados a un alcance de 20 años luz) para radiar toda la información de vuelta a la Estrella Remota. Estos droides también se emplean para trazar rutas de astrogación adicionales que le proporcionen una visión más detallada del sector Kathol a la Estrella Remota. Los droides no aterrizan en los planetas, sino que están programados para volver a la Estrella Remota en busca de nuevas instrucciones. Cada droide puede funcionar independientemente durante un mes antes de tener que volver a la Estrella Remota para ser reprogramado.